Reconozco la necesidad de mirarte como mi Padre, aceptarte como mi creador y RECONOCERTE como mi único salvador. Hoy, te doy toda la honra, la alabanza y la adoración pues sólo tú eres digno de recibirla.
Señor, gracias por la vida, por mi familia, por pertenecer al Instituto San Juan de Laboyos, en donde me permites crecer y formarme como una persona integral en la búsqueda del propósito que me has asignado en la tierra.
Reconozco que mis faltas me han alejado de tí y te pido por favor que me perdones. Límpiame de toda maldad y no me dejes en la tentación. Guárdame de mis egos y retrocesos, líbrame del mal y pon en mi vida el testimonio de tu obra para gloria de tu nombre.
Señor, este día lo dejo en tus manos; confío en tu palabra, permíteme acercarme a ella con sentido de obra. Bendice mis decisiones a mi familia, amigos y enemigos, pon en su corazón tu llamado y condúceme por tus caminos para continuar la travesía por este mundo.
AMÉN
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